El equilibrio emocional a través de las Flores de Bach


Para entender el mundo emocional, lo primero que debemos saber es que dentro de cada persona conviven emociones contrarias y que ninguna de ellas existiría sin la otra. Al igual que en la naturaleza, donde de no existir la noche, el día no tendría ningún sentido.

equilibrio-emocionalTambién la condición humana parte de sentimientos contrarios: valor-miedo, tristeza-alegría, ira-serenidad, angustia-paz… y ambas caras de la moneda son siempre necesarias para entender la esencia del individuo.

El miedo es necesario para sobrevivir porque provoca un estado de alerta que nos protege, al igual que el enfado o la ira. Por lo tanto, y partiendo de esta base de la necesaria existencia de estados opuestos, las Flores de Bach persiguen encontrar un equilibrio perfecto entre los dos estados para lograr armonía y paz en el individuo.

También podemos encontrar referencias a las compensaciones internas de elementos contrarios en medicinas tradicionales tan antiguas como la China. La enfermedad y la salud son estados opuestos relativos de un momento, y que están sujetos a cambiar de estado igual que un péndulo en movimiento. La medicina china explica a la enfermedad y la salud por medio de la Teoría del Yin y Yang.

El Yin y el Yang, son estados de la naturaleza definidos y conocidos, que tienen 4 características esenciales: son opuestos, interdependientes, se consumen mutuamente y se transforman. En la naturaleza se cumplen las 4 características, por ejemplo si existe el agua existe el fuego, el día se transforma en noche y viceversa, no puede haber energía sin materia y si hay exceso es porque también hay deficiencia. Este equilibrio natural es el principio de la Teoría del Yin – Yang, sin Yin no hay Yang, y sin Yang no hay Yin.

Es al fin y al cabo la búsqueda del equilibrio, tanto físico como emocional, el objetivo último de esta y muchas otras medicinas, punto en el que confluyen totalmente con las teorías expuestas por Bach y su terapia floral.

Si la medicina tradicional alopática persigue la eliminación de los síntomas negativos y la homeopatía atiende al principio de los semejantes, y trata la enfermedad con la misma sustancia que en dosis tóxicas probaría los síntomas, el sistema confeccionado por el Dr. Edward Bach lo hace aumentando el sentimiento opuesto al que ha provocado el problema. Esta es la base de actuación, no se trata de eliminar un estado sino de potenciar el otro, ya que ninguno de los dos es negativo.

No se debe olvidar que dentro de cada uno de nosotros está toda la fuerza, confianza, coraje, alegría, la paz necesaria para ser felices, pero, en ocasiones, la balanza se inclina hacia uno de los lados dejando el otro vacío; es aquí donde las Flores hacen su trabajo, al posicionar cada cosa en su lugar y en su medida. Es igualmente negativo el exceso de pasividad como el de euforia, y se debe llegar a la medida justa de ambos para evitar la desarmonía que provoca tantas alteraciones emocionales.

Y esta forma de actuación no provoca contradicción interna alguna porque no somete ningún sentimiento propio del ser humano.

Pongamos de ejemplo el de una persona que siente grandes temores…..

La medicina tradicional añadiría fármacos para calmar, pasando incluso por encima del estado de alerta necesario para llevar una vida plena, es decir….

«Al tiempo que se encuentra cierta calma, también sumamos cierto atolondramiento, pérdida de memoria, concentración y capacidad de respuesta».

Este mismo malestar con la toma de Esencias Florales sería algo completamente distinto. No eliminamos ese miedo pues no es en sí mismo negativo, solamente existe cierto descontrol porque ha crecido demasiado en detrimento del sentimiento opuesto. Por lo tanto, se potenciará su contrario, es decir:

«Aumentar la valentía, fortaleza para emprender cualquier reto o tarea. Aportar capacidad resolutiva individual sin necesidad de esconderse del temor, teniendo las herramientas necesarias para enfrentarse a él y controlar la situación»

De esta forma ambos sentimientos (temor-valor) conviven dentro, pero el que antes resultaba un problema (temor) ahora queda en su justa medida, la necesaria para mantener ese estado de respuesta-alerta para la supervivencia. No se pierde, por tanto, control alguno, no tenemos: falta de memoria, despiste, cansancio excesivo, apatía…… porque no se ha suprimido ninguna función.

El equilibrio emocional es el objetivo a lograr cuando se comienzan a tomar las Flores de Bach

Es por esto que la toma de Esencias Florales no resulta un proceso agresivo ni contradictorio a nivel interno, no provoca el sometimiento de ninguna emoción. Si entendemos la condición humana y todos los amplios matices emocionales como algo integrador, sabremos que no es necesario dejar de sentir aquello que nos resulta negativo sino hallar un equilibrio sano en el que la parte positiva tenga un mayor peso que la negativa.

Y en la práctica es obvio que la sutileza, la calma y el ritmo de respeto a la naturaleza humana es el principio en el que basa su actuación cada una de las 38 Esencias Florales que componen el sistema de Bach.

 

Puedes consultar con una terapéuta experta en flores de Bach aquí

Puedes comprar flores de bach online aquí

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s